Accede a la lista de reproducción en YouTube de la serie de talleres online de las siete reglas de oro para las relaciones saludables.
El matrimonio puede ser feliz y estable. Especialmente si habéis incorporado los anteriores seis principios.
Sin embargo, es posible que necesites algo más, un anhelo de ... Seguro que estás buscando sentir que sois una familia.
A esto lo hemos llamado tener una trascendencia familiar en la que:
Tenéis una vida interior en común.
Habéis creado una cultura propia, con los elementos que la caracterizan.
Remáis en común en vuestros papeles y funciones, y en vuestros objetivos.
El paso de la individualidad a la comunidad es imprescindible para saberos y sentiros como una familia.
Cada familia ha creado una cultura; no en el sentido de las naciones, sino como una personalidad propia con una identidad y unas características.
En esta cultura familiar:
Respetamos los sueños, anhelos y aspiraciones mutuos.
Tenemos una vida significativa. Nuestra relación matrimonial y familiar también es significativa.
Individualmente, nos abrimos a las perspectivas y criterios de nuestro cónyuge. Entendemos su forma de ver y encarar la vida, comprendemos su cosmovisión.
¿Cómo podemos saber hasta qué punto hemos creado una cultura familiar propia?
Podéis pedir un cuestionario de Verdadero o falso en el correo electrónico de Familias XXI. También podéis ver una explicación en el vídeo que grabamos para este taller, en el minuto 02:32.
Hay cuatro bloques:
Rituales.
Funciones.
Objetivos.
Símbolos.
No hay respuestas correctas ni incorrectas. Se trata simplemente de averiguar dónde os encontráis.
Algunas de las preguntas.
Coincidimos en los rituales en cuanto a las cenas familiares en casa. V o F.
Las comidas festivas son muy especiales para nosotros. V o F.
Reunirnos al final del día es muy especial. V o F.
Coincidimos en el papel de la televisión. V o F.
Hay cuatro bases que conforman la trascendencia familiar dando sentido de familia y de cultura propia. Todos los miembros de la familia participan en cada una de ellas y les dan forma.
Rituales.
Funciones.
Objetivos.
Símbolos.
Llamaremos rituales a aquellos actos familiares que se llevan a cabo en ocasiones especiales o en momentos determinados. Suelen ofrecer un lugar al que mirar en algunas circunstancias que generan tensión.
En la familia, la mayoría de esos rituales son informales. Conectan emocionalmente a los cónyuges entre sí, y con sus hijos. Imagina ese día que habéis apartado como familia para ver una película con palomitas en el sofá. O piensa en ese paseo que soléis hacer juntos, hablando, riendo y compartiendo experiencias.
También hay rituales que hemos heredado de nuestras propias familias, los hemos incorporado a nuestro matrimonio y los hemos adaptado a nuestra personalidad familiar. Intenta recordar en cómo se planificacan las vacaciones en casa de tus padres; y cómo las planificáis ahora.
Esta suma de rituales hacen única a vuestra familia: aportan sentido de pertenencia y de seguridad.
Acercan y conectan a los cónyuges. Fomentan la intimidad. Incluso con personas ajenas a vuestra unidad familiar.
Una cita semanal para vosotros solos, sin niños.
Celebraciones de triunfo, éxito o logros.
Rituales en torno a los inconvenientes, el cansancio y las preocupaciones.
Rituales comunitarios abriendo vuestra casa. Hospitalidad, comidas, eventos, ...
El propósito de este ejercicio es identificar posibles fuentes para la creación de rituales familiares únicos.
¿Cómo solemos comer juntos? ¿Cómo deberíamos comer juntos? ¿Cuál es el significado de la hora de las comidas? ¿Cómo eran las comidas en nuestras respectivas familias?
¿Cómo deberíamos despedirnos al comienzo del día? ¿Cómo era esto en nuestras respectivas familias? ¿Cómo queremos que sea este momento?
Una pareja siempre tiene a dos individuos que procuran acoplarse para formar relación saludable entre ellos. Las funciones que cada uno va a desempeñar juegan un papel vital.
La perspectiva de nuestras funciones para nosotros y para nuestra pareja va a determinar el ambiente: armonía o tensión.
Es por ello que las familias saludables han sabido adecuar las expectativas al interés propio, al interés del otro y al interés de la relación y la familia. No consiste en una renuncia, sino en una adaptación en la forma, en la ocasión o en la planificación.
Es evidente que, si esas expectativas son similares, el matrimonio ya tendra muy avanzada una tarea muy laboriosa.
Sin embargo, la precaución ha de hacer acto de presencia, porque aunque el concepto o la expectativa sea muy parecida, el significado para cada uno en el matrimonio va a ser diferente.
Inconscientemente, mientras cumplimos con nuestros papeles y funciones, estaremos realizando una transferencia de nuestros valores y actitudes a nuestros hijos.
¿Cuál es nuestra función en la familia? ¿Qué esperamos de nuestro trabajo? ¿Qué prioridad doy al tiempo? ¿Cómo gestiono los bienes? ¿A quién le dedico tiempo y esfuerzo? ¿Dónde me involucro?
Todas estas preguntas tienen una contestación basada en nuestras expectativas y funciones. Nuestra pareja y nuestros hijos ven esto.
Comentad vuestras ideas sobre vuestras funciones en la vida y en la pareja.
¿Cómo te sientes en tu papel de esposa o de esposo? ¿Qué significa este papel en tu vida? ¿Cómo veían este papel tu padre o tu madre? ¿Eres tú parecido/a o diferente? ¿En qué te gustaría modificar este papel?
¿Cómo te sientes en tu papel de padre o madre? ¿Qué significa este papel en tu vida? ¿Cómo veían este papel tu padre o tu madre? ¿Eres parecido/a o diferente? ¿En qué te gustaría modificar este papel?
Los objetivos personales ofrecen sentido a la vida, en parte. Las metas, los fines y cualquier punto al que mirar nos ayudan a enfocarnos.
Una función muy importante de la relación de pareja es el trabajo conjunto para encontrar esos objetivos personales de cada uno. En este trayecto, que nunca se acaba, la intimidad va a crecer y va a progresar en profundidad.
Nos hemos dejado llevar por las circunstancias y las expectativas de otros: no sabemos cuáles son nuestros objetivos más profundos. Evitamos hablar de ellos.
Como pareja, nuestros objetivos pueden ser muy dispares. Hace falta una armonización.
Explorad el papel que desempeñan los objetivos en vuestras vidas.
Escribe una descripción de tu misión en la vida. Escribe tu propia nota necrológica. ¿Qué te gustaría que pusiera?
¿Qué objetivos tienes en la vida para ti mismo/a, para tu pareja, para tus hijos? ¿Qué quieres conseguir en los próximos cinco o diez años?
Los símbolos familiares están representando valores y creencias que compartimos. Su importancia es reconocida al mirar a otras generaciones de nuestra familia extendida, acercándonos al legado que nos han dejado.
Objetos.
Algunas historias familiares.
Lugares.
Ciertos recuerdos.
Algunos objetos se convierten en símbolos porque nos hablan de la persona que nos lo dio, de la circunstancia en que lo adquirimos o por el afecto a la historia que hay detrás.
Fotografías, un libro, la silla de la abuela en la que cogía a sus nietos, ...
Las historias familiares recibidas nos introducen a los valores de los que nos precedieron, nos abren una ventana al esfuerzo invertido por la generación que somos.
Nuestro cónyuge y nuestros hijos nos amarán más y mejor cuando les contemos esas historias.
Como familia, también crearéis historias que funcionarán como símbolos de valor y de amor.
Muchos recordarán el lugar en el que ... y lo visitarán. Las ensoñaciones de un noviazgo incipiente, los pensamientos que fluyen al visitar la casa de ...
Algunos lugares son símbolos poderosos que van tallando la identidad familiar. Tu pareja y tú vais a dejar un legado a vuestros hijos en el que los lugares van a tener un papel fundamental.
Aunque ese objeto no exista, o el lugar haya cambiado, o la persona no esté ahí, ... hay recuerdos que simbolizan cosas importantísimas. No queremos perder ese recuerdo porque nos une a algo que amamos.
Es necesario que demos entrada a nuestra pareja y a nuestros hijos a esos recuerdos; unos recuerdos sin los cuales no seríamos nosotros mismos.
El significado de algunos símbolos.
¿Qué símbolos (como fotografía u objetos) muestran quiénes son nuestra familia y qué significa para nosotros ser _____________ (vuestros apellidos)?
Las historias familiares son también símbolos. Generalmente hacer referencia a una serie de valores. Describe algunas de tus historias familiares, historias de las que te enorgullezcas y que quieres que formen parte de la tradición de tu familia.
Este ha sido el último taller de la serie Siete reglas de oro para un matrimonio saludable.
A partir de aquí, te corresponde a ti, lector, el trabajar para un matrimonio saludable. Familias XXI está dispuesto a ofrecerte el apoyo que necesites, especialmente en lo que es prevención.
Solicita los ejercicios. No son para hacerlos en una tarde, sino en semanas o meses. Serás más consciente de la riqueza que encierra tu matrimonio.